La pandemia revela la dependencia de los adultos mayores en ámbitos como los cuidados y la necesidad de apoyo, pero nos muestra que este sector es capaz de tomar sus propias decisiones y ocupan un lugar preponderante en las redes familiares y afectivas.
Muchos adultos mayores han visto superada su dependencia digital y se incorporan exponencialmente a las redes sociales, al comercio en línea, a los juegos y a la realización de trámites en línea. En este sentido, es fundamental mejorar la UX para este sector y ofrecerles alternativas enfocadas a la mejora de la calidad de vida así como la simplificación y adaptación del lenguaje escrito y gráfico.
Existe una imagen recurrente del “adulto mayor” que borra los distintos tipos de identidad. No hay un solo tipo de vejez sino muchas que concurren y coexisten conformando un segmento altamente diverso.
La vulnerabilidad se evidenció durante la pandemia, pero también se visibilizó su adaptación al cambio y su resiliencia. Se debe transitar hacia un modelo de adultos mayores en donde no sean infantilizados ni en el ámbito familiar ni en el institucional y en donde no se conculquen derechos a cambio de atención, alimentación o vivienda.