Las leyendas no son solo para ignorantes

Si tiene la creencia de que las Fake News o las leyendas urbanas son trampas para “gente ignorante”, o sin educación, sin embargo, el exceso de información ha hecho que en nombre de la fe o de la ciencia, la mayoría haya caído en teorías que van de lo absurdo a lo elaborado.

 

La ciencia no es un discurso infalible, sus avances se basan en el error. Cuando la gente busca certezas y no las encuentra, el discurso científico, en constante cambio por su naturaleza evolutiva, no ofrece la seguridad que se estaba buscando. Tanto para los medios de comunicación, como para los prestadores de servicios, la cautela es la premisa fundamental.

 

La construcción de la identidad pasa por la fe, las creencias y las costumbres. Subestimar estos componentes en los discursos publicitarios puede resultar contraproducente. Por un lado, se busca no caer en mentiras por otro, incomodar a la gente con la confrontación directa a su sistema de creencias puede ser arriesgado.

 

La creencia en un discurso genera confort y seguridad. Es importante generar discursos creíbles, pero también responsables. La difusión de Fake News por parte  de celebridades e influencers termina repercutiendo en las marcas que los patrocinan.